"Peor que la de Pinochet": Consejera oficialista carga contra el proyecto de Constitución en Chile
El nuevo proceso para cambiar la Constitución que Chile heredó de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) sigue con mal pronóstico.
Este jueves, la consejera constitucional del oficialismo, María Pardo, aseguró en una entrevista que el texto de la Carta Magna que se está redactando "es peor" que el actual.
🎙️ EN VIVO |En #ADNHoy María Pardo (@mariapardover ) y definición de la izquierda: "Aun cuando vemos que el balance general es negativo y que no hay vuelta atrás respecto a temas aprobados, también es cierto que podemos incidir en unos pocos"📻 https://t.co/8szv34JQPFpic.twitter.com/HlnMdKjmpy
— Radio ADN (@adnradiochile) October 19, 2023
"El balance que nosotros hacemos es negativo, por no decir muy negativo (...). Lamentablemente, tengo que decir que me quedo con la actual Constitución (...). Se está escribiendo una Constitución en democracia peor que la actualmente vigente, que fue escrita en dictadura. Así de mala es, ese es el mensaje que queremos transmitir, fuerte y claro", declaró a Radio ADN.
Pardo, de Convergencia Social (CS), integra la Comisión Mixta que debe hacer los últimos ajustes al texto que será sometido a plebiscito el 17 de diciembre.
"Es una Constitución mucho más identitaria, una Constitución que rigidiza mucho más, que petrifica el futuro, que no permite que las diferentes visiones de la ciudadanía, que es tan plural en Chile, puedan desarrollarse", agregó.
"Una mayoría en contra"
Los sondeos avisan que la segunda propuesta de Carta Magna podría fracasar como la primera, plebiscitada en septiembre de 2022. En el más reciente sondeo de la firma Cadem, de principios de octubre, el 54 % de los encuestados manifestó que votaría en contra del nuevo texto constitucional, mientras que 24 % lo haría a favor.
A diferencia del proceso constituyente anterior, que comenzó en 2020 y terminó con un plebiscito, en este segundo intento no hay mucho entusiasmo por parte de la población.
La derecha y la ultraderecha, que tienen abrumadora mayoría entre los 51 redactores de la nueva Carta Magna, han impuesto en el texto polémicos artículos, considerados por la izquierda como "retrocesos" en materia de derechos humanos.
Entre los puntos más polémicos figuran "el derecho a la vida de quien está por nacer" o la expulsión inmediata de los migrantes que entren de forma irregular al país sudamericano.