
La visita de J.D. Vance al Vaticano no sale como se esperaba

Diferentes medios de comunicación han resaltado detalles sobre el encuentro del vicepresidente de EE.UU., J.D. Vance, con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, este sábado, afirmando que no se consiguieron los resultados esperados.
Presuntamente, el papa Francisco habría rechazado una reunión con Vance como una reprimenda por las deportaciones masivas, ejecutadas en el país norteamericano desde la llegada al poder del presidente Donald Trump, según escribe Daily Mail, destacando que el vicepresidente también tuvo un recibimiento frío.

A su vez, The Daily Beast señaló que Francisco envió a su segundo al mando, el cardenal Parolin, a darle una charla a Vance sobre la compasión. Esto posiblemente en relación a las múltiples críticas hechas por parte de la Iglesia católica al Gobierno estadounidense y sus agresivas políticas antimigratorias.
Sin embargo, el papa recibió a Vance brevemente este domingo para intercambiar un saludo por la Pascua. En imágenes del encuentro se puede ver cómo le entregan regalos al vicepresidente para sus hijos y esposa, quienes lo acompañan en el viaje. Además, se escucha a Vance diciéndole que "es bueno verlo", y al papa agradeciéndole por su visita.
"Hubo un intercambio de opiniones"
Sobre la reunión del vicepresidente con el cardenal Parolin, la Oficina de Prensa de la Santa Sede comunicó que "hubo un intercambio de opiniones sobre la situación internacional, especialmente en lo que respecta a los países afectados por guerras, tensiones políticas y situaciones humanitarias difíciles, con especial atención a los migrantes, refugiados y presos". Asimismo, indicó que se expresó el deseo de una colaboración serena entre el Estado y la Iglesia católica en EE.UU.
Por su parte, un comunicado de la Casa Blanca afirmó que "discutieron su fe religiosa compartida, el catolicismo en Estados Unidos, la difícil situación de las comunidades cristianas perseguidas en todo el mundo y el compromiso del presidente Trump de restaurar la paz mundial".
El papa Francisco ha dejado claro en múltiples ocasiones su enérgica oposición ante las deportaciones masivas. En febrero, el sumo pontífice envió una carta a los obispos estadounidenses pidiéndoles que recordaran que Jesús mismo vivió en el exilio y asegurándoles que estas acciones "dañan la dignidad de muchos hombres y mujeres, y de familias enteras, y los coloca en un estado de particular vulnerabilidad e indefensión".