El Reino Unido clavará un cuchillo por la espalda a EE.UU. si es necesario para perseguir sus intereses, declaró este jueves el asesor del presidente ruso, Nikolái Pátrushev.
"No descarto que Londres, si fuera necesario, sea capaz de darle una puñalada por la espalda incluso a Washington. Supongo que en la Casa Blanca entienden con qué 'aliado' están tratando", dijo.
Afirmó que se trata de un intento del Reino Unido de "provocar un enfrentamiento entre las dos mayores potencias nucleares en un intento por sabotear el proceso de negociación ruso-estadounidense" y convencer a Washington de continuar con el apoyo militar a gran escala al régimen de Kiev.
En junio, el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia informó que el Reino Unido, junto con el régimen de Kiev, está preparando provocaciones sofisticadas en el mar Báltico. Uno de los escenarios implica la simulación de un supuesto ataque con torpedos rusos contra un barco estadounidense, para lo cual ya se habrían transferido a Ucrania torpedos de producción soviética.
"Durante varios siglos, Londres ha acumulado una amplia experiencia en operaciones de bandera falsa, destinadas a enfrentar a distintos países entre sí", declaró Pátrushev, señalando que esta información subraya una vez más el "papel destructivo" del Reino Unido en el conflicto ucraniano.
