Los beatos José Gregorio Hernández y la Madre Carmen Rendiles Martínez fueron canonizados este domingo por el papa León XIV, convirtiéndose en los dos primeros santos de origen venezolano.
La canonización de estas emblemáticas figuras, aprobada por el papa Francisco en sus últimos meses de vida, fue largamente esperada por el pueblo venezolano. La santa misa se realizó a las 10:30 de la mañana (hora del Vaticano) en la Basílica del Sacro Cuore di Gesù.
Aunque a la hora de Venezuela el evento se dio de madrugada, miles de feligreses se reunieron en distintos puntos del país para celebrar a nombre de José Gregorio y la Madre Carmen. En Caracas, el Santuario Nuestra Señora de la Candelaria, donde reposan los restos del ahora santo, ha sido el epicentro del festejo, con una 'Vigilia de la Santidad', que comenzó desde la medianoche del sábado. De igual forma, en la Plaza Bolívar de Chacao, la Orquesta Sinfónica Juvenil ofreció un concierto.
"¡Día histórico: 19 de octubre! Es un momento realmente emocionante y de júbilo espiritual para Venezuela y más allá de nuestras fronteras", señaló el presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien visitó la casa donde José Gregorio Hernández vivió en Caracas y desde allí vivió "toda la ceremonia de canonización de él y de la Madre Carmen Rendiles".
"¡Qué hermoso ver la bandera tricolor en este día de reivindicación de la venezolanidad! Estamos maravillados con la fuerza milagrosa de nuestro Pueblo", agregó Maduro.

El 'médico de los pobres'
Mientras tanto, en Isnotú, el pueblo natal de José Gregorio, se mantuvo una vigilia con procesión, cánticos y oraciones, también desde la jornada anterior. El próximo 25 de octubre, se celebrará una misa masiva con obispos venezolanos en el Estadio Monumental de Caracas.
Horas antes de la canonización, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, lideró la inauguración de la estatua de José Gregorio en la Plaza La Candelaria y anunció que el presidente Nicolás Maduro había entregado más de 20 obras en diferentes partes del país en honor a los nuevos santos.
José Gregorio Hernández es una de las figuras más emblemáticas de la cultura religiosa y científica de Venezuela. Nació en 1864 en un pequeño pueblo del estado Trujillo y estudió medicina en París. Su profesionalismo y esfuerzo por acercar su profesión hasta los más necesitados lo llevaron a ser conocido como el 'médico de los pobres'. En 1919, a sus 55 años, falleció luego de ser atropellado por un automóvil y recibir un golpe mortal contra una acera.
La noticia de su muerte conmocionó al país y, desde entonces, se convirtió en una figura venerada tanto por católicos como por personas de otras creencias religiosas. Se le atribuyen numerosos milagros relacionados con la curación de aquellos que se encuentran en estados críticos de salud.