Una madre, un padre y sus dos hijos fallecieron por intoxicación en Estambul en distintos días de la última semana, tras ser envenenados el miércoles, según informa el periódico turco Hurriyet. Se sospecha que la causa fue un pesticida utilizado en el hotel.
La pareja turco-alemana, formada por Servet y Cigdem Bocek, había viajado a Estambul desde Alemania con sus hijos, Kadir Muhammet y Masal. La noche del 12 de noviembre, Cigdem encontró a su hija Masal inmóvil en el suelo del hotel y llamó a emergencias para que la trasladaran a un hospital.
La Policía envió equipos médicos y policiales al hotel tras la denuncia, y descubrió que se había realizado una fumigación con un pesticida peligroso en el hotel mientras la familia no se encontraba. Se han realizado 11 arrestos relacionados al envenenamiento.
Masal falleció esa noche, seguida de su hermano Kadir Muhammet. Dos días después, la intoxicación cobró también la vida de la madre, Cigdem. El padre, Servet, fue trasladado al hospital y falleció recién este lunes por la noche, a pesar de las intervenciones médicas.
El taxi de ida al hospital
En las imágenes de la cámara del interior del taxi en el que se trasladaron al hospital, se ve a la madre y a los niños débiles en el asiento trasero y al padre nervioso, mientras uno de los niños vomita en una bolsa.
El taxista, Sercan Tanriverdi, declaró que la familia subió el día 12 a las 11:20 horas y que pidieron ir al hospital más cercano. La madre había quedado inconsciente y el padre dijo que habían comido o bebido algo que les había sentado mal.
Cuando Tanriverdi intentó entablar conversación con el padre, este le dijo: "Cada vez que vengo a Estambul, me pasa algo. El año pasado, cuando vine, tuve un accidente de moto. Me rompí el brazo y la pierna. Esta vez también he tenido mala suerte".
Buscando culpables
El propietario del hotel donde se hospedó la pareja con sus hijos tiene antecedentes penales por lesiones por negligencia y estafa agravada, entre otras ofensas. Este fue uno de los detenidos.
Otros dos detenidos fueron el empleado de la empresa de fumigación que se encargó del trabajo ese día y el propietario de dicha empresa. El hombre encargado de la fumigación afirmó que había cerrado "todas las aberturas para que no se filtrara el aire", y que utilizó dos botes de pesticida como de costumbre.
Tres personas más que se alojaban en el hotel habían sufrido una intoxicación similar. Una de ellas era quien había ayudado a la familia y había estado dentro de la habitación, mientras que las otras dos eran turistas y también habían sido ingresados con náuseas y vómitos.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció que la investigación continúa y que no se tolerará la más mínima negligencia en materia de seguridad alimentaria. "Nos esforzamos por hacer todo lo necesario para garantizar que los productos que nuestra gente compre estén libres de adulteración, desechos y engaños", señaló.
Los investigadores esperan el informe de medicina forense que determinará si la causa de la muerte de la familia fue una intoxicación alimentaria o el pesticida nocivo.



