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Congreso de México aprueba definitivamente la histórica reforma energética
El Congreso de México ha aprobado la reforma energética que abre el sector de la energía a la inversión privada. Los diputados han avalado el proyecto en sus términos generales y particulares.
El documento tiene que ser ratificado por al menos 17 de los 32 los estados del país porque incluye cambios a tres artículos de la Constitución, informa 'La Cronica'. Posteriormente el presidente Enrique Peña Nieto firmará el documento final.
La legislación fue aprobada por la Cámara baja con 354 votos a favor y 134 en contra. Los diputados de izquierda fueron los que votaron en contra de la reforma.
El proyecto fue aprobado sin modificación alguna respecto de lo avalado por el Senado el 11 de diciembre.
La reforma marcará el fin del monopolio del petróleo y del gas por parte del gigante estatal Pemex, que pugna por revertir una fuerte caída en la producción de crudo debido a una insuficiente inversión. La reforma permitirá conceder licencias a empresas privadas y compartir las ganancias petroleras con ellas.
El analista internacional Álex Corrons dijo a RT que en este caso estamos ante el mismo proceso de desmantelamiento de los recursos públicos que tiene lugar en todo el mundo.
El proyecto de la reforma generó gran rechazo en la sociedad mexicana. En septiembre pasado miles de personas protestaron en México D.F. contra lo que consideran una "privatización disfrazada" de Pemex.
"Lo que se busca con estas manifestaciones es que dejen de tratar de privatizar a Pemex. No queremos que la renta petrolera deje de ser patrimonio de los mexicanos", agregó el participante de la manifestación.
La legislación fue aprobada por la Cámara baja con 354 votos a favor y 134 en contra. Los diputados de izquierda fueron los que votaron en contra de la reforma.
El proyecto fue aprobado sin modificación alguna respecto de lo avalado por el Senado el 11 de diciembre.
La reforma marcará el fin del monopolio del petróleo y del gas por parte del gigante estatal Pemex, que pugna por revertir una fuerte caída en la producción de crudo debido a una insuficiente inversión. La reforma permitirá conceder licencias a empresas privadas y compartir las ganancias petroleras con ellas.
El analista internacional Álex Corrons dijo a RT que en este caso estamos ante el mismo proceso de desmantelamiento de los recursos públicos que tiene lugar en todo el mundo.
El proyecto de la reforma generó gran rechazo en la sociedad mexicana. En septiembre pasado miles de personas protestaron en México D.F. contra lo que consideran una "privatización disfrazada" de Pemex.
"Lo que se busca con estas manifestaciones es que dejen de tratar de privatizar a Pemex. No queremos que la renta petrolera deje de ser patrimonio de los mexicanos", agregó el participante de la manifestación.
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