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La reunión en Doha da a la Liga Árabe derecho a armar a los rebeldes sirios
La 24º cumbre anual de la Liga Árabe, que este martes se celebró en Qatar, confirió a cualquier país miembro el derecho de armar a los rebeldes sirios.
La cumbre árabe en Doha aprobó este martes una resolución que da a los estados miembros de la Liga Árabe el "derecho" a ofrecer ayuda, incluso militar, "para apoyar la resistencia del pueblo sirio y el Ejército Sirio Libre".
El jefe de la oposición de Siria, Moaz Ahmed al Jatib, representaba al país en la Liga Árabe este martes y pidió en un vehemente discurso que la oposición siria tenga sitio incluso en las Naciones Unidas.
Moaz Ahmed al Jatib insistió también en que el futuro de Siria no debe ser determinado por las potencias extranjeras. Dijo que le ha pedido a Washigton "ayuda para proteger las zonas del norte", donde los rebeldes han logrado posicionarse, con el sistema Patriot de misiles tierra-aire.
Irán, a su vez, criticó a la Liga Árabe por dar el asiento de Siria a la oposición en la Cumbre en Doha. El viceministro de Exteriores de Irán para Asuntos Árabes y Africanos, Husein Amir Abdolahian, calificó de "precedente peligroso" para el mundo árabe que la "oposición, apoyada desde el extranjero", la Coalición Nacional Siria (CNFROS), ocupe el lugar del Gobierno en esa organización.
Ese procedimiento se podría aplicar en el futuro a otros estados miembros de organización panárabe y "podría suponer el final del papel de la Liga Árabe en la región", dijo el viceministro de Irán, país que se considera el principal aliado del Gobierno Sirio en Oriente Medio.
Por su parte, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, declaró que la cesión a la oposición siria del sitio reservado a Damasco en la Liga Árabe significa que el organismo se retiró del proceso de arreglo pacífico de la crisis.
Días antes el canciller ruso, Sergéi Lavrov, declaró que el suministro de armas a los rebeldes sirios supondría una violación de la ley internacional. "Esto supondrá una violación del derecho internacional, en cualquier caso", dijo el ministro ruso.
El analista político Lajos Szazdi considera que las armas que enviarían los países árabes a los rebeldes podrían caer en manos de traficantes. “Realmente, ni hay garantías de que los combatientes luchen por las causas que apoya Occidente y EE.UU. al darles ellos las armas, ni hay garantías de que las armas terminen en manos de los rebeldes”, sostiene.
El jefe de la oposición de Siria, Moaz Ahmed al Jatib, representaba al país en la Liga Árabe este martes y pidió en un vehemente discurso que la oposición siria tenga sitio incluso en las Naciones Unidas.
Moaz Ahmed al Jatib insistió también en que el futuro de Siria no debe ser determinado por las potencias extranjeras. Dijo que le ha pedido a Washigton "ayuda para proteger las zonas del norte", donde los rebeldes han logrado posicionarse, con el sistema Patriot de misiles tierra-aire.
Irán, a su vez, criticó a la Liga Árabe por dar el asiento de Siria a la oposición en la Cumbre en Doha. El viceministro de Exteriores de Irán para Asuntos Árabes y Africanos, Husein Amir Abdolahian, calificó de "precedente peligroso" para el mundo árabe que la "oposición, apoyada desde el extranjero", la Coalición Nacional Siria (CNFROS), ocupe el lugar del Gobierno en esa organización.
Ese procedimiento se podría aplicar en el futuro a otros estados miembros de organización panárabe y "podría suponer el final del papel de la Liga Árabe en la región", dijo el viceministro de Irán, país que se considera el principal aliado del Gobierno Sirio en Oriente Medio.
Por su parte, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, declaró que la cesión a la oposición siria del sitio reservado a Damasco en la Liga Árabe significa que el organismo se retiró del proceso de arreglo pacífico de la crisis.
Días antes el canciller ruso, Sergéi Lavrov, declaró que el suministro de armas a los rebeldes sirios supondría una violación de la ley internacional. "Esto supondrá una violación del derecho internacional, en cualquier caso", dijo el ministro ruso.
El analista político Lajos Szazdi considera que las armas que enviarían los países árabes a los rebeldes podrían caer en manos de traficantes. “Realmente, ni hay garantías de que los combatientes luchen por las causas que apoya Occidente y EE.UU. al darles ellos las armas, ni hay garantías de que las armas terminen en manos de los rebeldes”, sostiene.
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