¿Hay esperanza para los infectados con el virus de la hepatitis C?
Especialistas de la Academia Estatal de Medicina de los Urales (Rusia) anunciaron la cuarta etapa de pruebas clínicas de un fármaco innovador contra la hepatitis C. De ser exitosa, en medio año podrían comenzar a fabricarlo.
Según sus creadores, el fármaco es capaz de excretar el virus de las células. Como muchos otros medicamentos de este tipo se desarrolló a base de interferón, la proteína que el sistema inmunitario produce naturalmente como respuesta a los agentes externos, como virus y células cancerígenas.
Otro ingrediente también es tradicional, la alfafetoproteína, característica de la sangre de mujeres embarazadas que suministra sus nutrientes a los fetos y puede activar los mecanismos de 'limpieza' programados en las células.
Los farmacólogos rusos aseguran que la medicina no provoca ningún efecto adverso, precisamente porque consiste solo de proteínas naturales. Uno de los integrantes del proyecto, Serguéi Rodiónov, detalló los excepcionales resultados de algunas prubeas clínicas a las que ha sido sometido: después del tratamiento, los pacientes no muestran presencia del virus en la sangre. Sin embargo, todavía es pronto para hablar de un verdadero éxito; solo en caso de que los pacientes sometidos a exámenes muestren el mismo resultado durante dos años, la eficacia del fármaco estará confirmada.
La hepatitis C afecta al hígado y hace que deje de funcionar correctamente. Tras una fase aguda inicial que puede durar hasta un año, la enfermedad se hace crónica y puede evolucionar hacia una cirrosis o incluso a cáncer de hígado.
El tratamiento farmacológico más usado contra la hepatitis C se basa en la asociación del interferón administrado por vía subcutánea y la ribavirina por vía oral. El porcentaje de éxito es de hasta un 50%, dependiendo de la variante de virus. El éxito en este caso es la eliminación del virus en la sangre que se mantiene hasta un año después de terminar el tratamiento. Sin embargo, la ribavirina tiene efectos secundarios como provocar mutaciones en la descendencia del enfermo y la infertilidad. Por esta razón los médicos aconsejan no embarazarse hasta un año después de finalizar el tratamiento.