Vladímir Zelenski ha esquivado las preguntas de la prensa acerca de los misiles de crucero Tomahawk que Kiev solicita a Washington para atacar a Rusia.
"Hablamos también del [armamento] de largo alcance, por supuesto, y no quiero hacer declaraciones sobre esto", señaló este viernes después del almuerzo de trabajo con Donald Trump en la Casa Blanca.
"Decidimos que no vamos a hablar de ello, porque nadie quiere… Quiero decir que Estados Unidos no quiere una escalada [de tensiones]", explicó el líder del régimen de Kiev, compareciendo ante los reporteros.
Abordando la cuestión de los Tomahawks, Zelenski indicó que ese tema sigue "abierto" y reiteró que Kiev está muy interesado en recibirlos. También comentó que la parte estadounidense le dio a entender que también necesita estos misiles. "Nadie canceló este diálogo, este asunto, así que tenemos que trabajar más en ello", aclaró.
Pese a la insistencia de los reporteros, quienes preguntaron si se habló de alguna cantidad específica de Tomahawks en su reunión con Trump, Zelenski nuevamente se cerró en banda. "Pregúntenselo a la parte estadounidense. Es su armamento", cerró.
Aclarando, por último, si se va de la Casa Blanca esta jornada más optimista o menos optimista en cuanto a la posibilidad de hacerse con dichas armas, el líder del régimen de Kiev dijo que es "realista", dando por finalizados sus comentarios al respecto.